Verdaderas vacaciones
{mosimage}¡¡¡Oh, qué bueno!!! Ya llegan las merecidas vacaciones.
Ya llega ese período en que disponemos de mayor tiempo libre para descansar, pasear, leer, bañarnos en el mar o en la piscina y realizar todas esas actividades que nos hemos propuesto durante el año… incluyendo el típico “no hacer nada”.
Pero, atención, este es también un tiempo perfecto para muchas cosas más. Aquí van algunas claves:
Un tiempo perfecto para dedicar a la familia y a los amigos
Compartir en familia muchas actividades, regalar tiempo a nuestro/a esposo/a y a los niños será algo que no podemos (ni queremos) evitar. Tenemos ahora una nueva oportunidad para fortalecer los lazos familiares o reencontrarnos con nuestros amigos más queridos. Pasar tiempo de calidad con aquellos a quienes amamos va a fortalecer nuestros vínculos afectivos, nos dará una nueva dimensión de quienes somos y también de lo que valemos para quienes nos rodean.
Es verdad que la lucha de cada día nos va quitando esta dimensión de nuestra vida. Somos propensos a encerrarnos en nosotros mismos. Muchas actividades, poca comunicación. Será una primera victoria si logramos “conectarnos” con nuestros afectos.
Un tiempo perfecto para reflexionar
Lo que hemos hecho, aquellos logros alcanzados, algunos golpes recibidos… serán días propicios para meditar.
Quién sabe si una oportunidad para rezar y hablar con Dios. Él no está nunca de vacaciones y aún mejor: está dispuesto a escucharnos. Por lo tanto, hemos de aprovechar este tiempo en el que quizá apagaremos el móvil y nos desconectaremos del reloj, para estar más tiempo con este ser invisible y maravilloso. Será una oportunidad nueva, diferente e irrepetible.
Quienes se lo propongan, podrán vivir más intensamente el "ser cristianos". Para otros será un primer intento de volver a la Fuente.
Un tiempo perfecto para perdonar
También podremos tomar un tiempo en meditar sobre aquellas personas, actitudes o situaciones que nos han lastimado y decidir perdonar a quienes (voluntaria o involuntariamente) nos han herido.
El perdón a quienes nos han hecho daño es, ciertamente, difícil. Pero no imposible. Además, es conveniente y necesario.
Podríamos comenzar por revisarnos interiormente… si hay un deseo escondido de desquitarse o vengarse de alguna manera ante el daño recibido, esto ensucia el alma.
Pero el perdón es algo liberador. Una exigencia que pareciera imposible cumplir. De hecho, nuestras heridas, muchas veces nos inclinan a la venganza. Perdonar es la decisión correcta.
Un tiempo perfecto para diseñar otro futuro
Al volver a la rutina, las cosas no deben ser necesariamente iguales. En estas vacaciones podrás tomarte un tiempo para pensar en algunos cambios que puedan ayudarte a alcanzar nuevas metas o generar algún hecho diferente. Quizá un nuevo negocio o pensar en avanzar intelectualmente con algún curso, carrera o estudio.
Decide provocar cambios efectivos, cambios que influyan positivamente en los demás y que te den nuevos motivos para seguir adelante. A veces, una decisión de cambiar puede abrir una nueva puerta que tú creías bloqueada.
Tal vez puedas ayudar a alguien y no lo has intentado o desees apoyar una causa noble o simplemente organizar una reunión de amigos. Supera la codicia, el egoísmo y el hedonismo. Evita la hipocresía, la crítica, la mentira, la presunción engañosa e interesada o la ociosa vanagloria. Vive la solidaridad. No lo quieras todo para ti. Piensa en quienes no tienen vacaciones, porque ni siquiera tienen el pan de cada día. La caridad tampoco toma vacaciones.
Un tiempo perfecto para vivir la naturaleza
Vive el entorno. En la playa, en la montaña, en la serranía… disfruta de un buen paisaje o de una puesta de sol. Graba un buen momento vivido. Toma una foto de algún instante agradable para no olvidarlo y conservar su brillo. Descubre la presencia de Dios. Agradece por disfrutar de una naturaleza tan hermosa. Vive tu nombre y condición de ser humano.
Un tiempo perfecto para celebrar la vida
No te avergüences en este verano de ser una persona profunda, reflexiva, de defender tus creencias y tu fe.
Ser optimista es una decisión excelente. Vive la vida. Disfruta de ella. La vida es el gran regalo.
¡¡Ah!!, y no hagas peligrar tu propia vida y evita riesgos en la vida de los demás. Sí, claro, otra vez lo mismo: ¡¡Conduce con precaución!! Nos vemos a tu regreso.
El Centre Betania es la expresión de un numeroso grupo de vecinos de Castelldefels, que impulsa proyectos de desarrollo social y comparte un fuerte sentimiento solidario, sin importar trasfondos sociales, religiosos o políticos.
Cada domingo a las 11 h se lleva a cabo una celebración especial: “La Fiesta de la Vida”.
Centre Betania
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Fernando Lovero
Graciela Pinella