La (in)seguridad

La (in)seguridad

{mosimage}La historia de la protección social de los trabajadores en España empieza en el año 1900 con la creación de la Ley de Accidentes de Trabajo. Más adelante, en 1908, se crea el Instituto Nacional de Previsión, en 1919 el Retiro Obrero, en 1923 el Seguro Obligatorio de Maternidad, en 1931 el Seguro de Paro Forzoso, en 1942 el Seguro de Enfermedad y en 1947 el Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez.  A partir de esa fecha, se crea un sistema basado en Mutualidades Laborales que no funcionó bien por las discriminaciones entre sectores de trabajadores y una gestión defectuosa.

En 1963 se crea la Ley de Bases de la Seguridad Social y el 1 de enero de 1967 entra en vigor la Ley General de la Seguridad Social que pretende unificar el sistema, pero la pervivencia de multitud de organismos superpuestos no lo permite. El artículo 41 de la Constitución española ordena a los poderes públicos mantener un régimen público de seguridad social  para todos los ciudadanos que garantice la asistencia y la prestaciones sociales en situaciones de necesidad. Para dar cumplimiento a este artículo, de los Pactos de la Moncloa se deriva el Real Decreto Ley 36/1978, que reestructura el Sistema de la Seguridad Social.

Se crean dos entes públicos dependientes del Ministerio de Trabajo: la Tesorería General de la Seguridad Social (que se encarga de la recaudación de cuotas y de la afiliación de los trabajadores principalmente) y el Instituto Nacional de la Seguridad Social (que se encarga del pago de las prestaciones).

Otro hito importante son los Pactos de Toledo, por los cuales y con el consenso de todas las fuerzas políticas, se determina la hoja de ruta para mantener la estabilidad financiera del sistema y las prestaciones futuras de la Seguridad Social. El Servei Català de Salut  es el ente público responsable de garantizar la prestación sanitaria de cobertura pública para todos los ciudadanos de Cataluña y desplazados del resto de España.

Se financia a través del Pressupost de la Generalitat de Catalunya aprobado por el Parlament català. En la página de internet del CatSalut se reconoce el financiamiento históricamente insuficiente de la sanidad pública catalana para luego informar de que el presupuesto del CatSalut en el 2007 es de 8677,94 millones de euros, correspondiendo 1184,86 € por persona y año, es decir, 3,25 € por persona y día en gastos sanitarios.

Pues bien, a mí no me salen las cuentas y voy a poner sólo un ejemplo: a mi padre en noviembre del 2006 le diagnostican una hernia inguinal, en febrero del 2007 le visita el cirujano y le hacen en dos semanas las tres pruebas del preoperatorio (cosa que me alucinó, por cierto). Pedimos hora para la operación y nos dicen que hay una lista de espera de un año, pero se persona en el Hospital de San Lorenzo hace unos días y le dicen que para junio del año que viene. Es una operación sin ingreso y, desde el diagnóstico a la operación, van a transcurrir 19 meses.

Con los 3,25 € que le corresponden al día del presupuesto hubiera tenido para pagar una Mutua Médica privada y le sobraría dinero, estaría operado y podría caminar normalmente y no tener dolores. La salud es lo más importante para el ser humano y la sanidad pública NO LA GARANTIZA.