Balance patrimonial
{mosimage}Normalmente se piensa que los instrumentos financieros los utilizan solamente las empresas o las personas con mucho dinero. La causa principal de esta creencia es el desconocimiento provocado por una falta generalizada de educación en finanzas personales. Nadie nos ha enseñado cómo gestionar nuestro dinero.
Sin embargo, debemos usar algunos instrumentos de medición y control, con el objetivo de dirigir nuestra vida financiera. Es importante que los métodos que usemos sean de fácil manejo y realmente nos sirvan para tomar decisiones. Recordemos: “sólo lo que se mide, se puede mejorar”.
Empezaremos el análisis de nuestra situación financiera particular, como lo haría cualquier empresa, por la creación de un Balance Patrimonial. Éste será nuestro punto de partida para saber cómo evoluciona nuestro patrimonio año a año. Cuando se habla de patrimonio, se confunde con la “ilusión económica” que ha generado el incremento del precio de los pisos haciendo que todos pensemos que tenemos mas de lo que realmente poseemos.
El balance patrimonial es una fotografía de nuestra situación financiera en un momento dado. Hagámoslo práctico, visual y por escrito. Dividamos una hoja en dos partes. Ponemos a la izquierda el Activo, es decir, todos los bienes y derechos que tenemos: piso, coche, acciones, dinero en banco, préstamos a familiares… En el caso del piso no sabemos el valor exacto a no ser que lo vendiésemos, por lo tanto recomiendo hacer una estimación conservadora y realista, sino estaremos engañando el balance.
En la derecha de la hoja pondremos el Pasivo, donde registraremos las deudas que tenemos: el saldo deudor del piso con un banco, deudas en la tarjeta de crédito, préstamo que hicimos para comprar el coche, entre otros.
A partir de ahí, se puede calcular el Patrimonio Neto que es la diferencia entre la columna de la derecha (activo) y la de la izquierda (pasivo). Esto es lo que realmente se tiene. El objetivo a nivel financiero será aumentar nuestro patrimonio neto por dos vías: incrementando el activo o, reduciendo las deudas del pasivo.
Os animo a que hagáis este ejercicio de cálculo para tener un punto de partida en nuestras finanzas personales.