El agotador camino de las primeras

El agotador camino de las primeras

{mosimage}Salti y Laura (perdón por la confianza) fueron las primeras mujeres de la policía local de Castelldefels hace veinticinco años. Desconozco qué porcentaje de hombres, compañeros, estuvieron a su lado y cuántos las miraron con mala cara, cuántos ciudadanos se las estudiaron en la distancia y cuántos les dieron la bienvenida, pero seguro que no les fue nada fácil o, al menos, estoy segura de que les resultó más complicado insertarse en el grupo que a sus compañeros-novatos hombres.

Ser pionera en cualquier lugar siempre está lleno de complicaciones. Cuán duro tuvo que ser para María Pepa Colomer, primera mujer piloto española que en 1931, con tan sólo dieciocho años, manejaba sin problemas los mandos de un avión.

Si es difícil ser la primera, que le pregunten a Hillary Rodham Clinton. No la conozco más que por los medios de comunicación, pero una amiga mía estuvo trabajando con ella codo a codo durante cuatro años (Presidencia de Bill Clinton) para sacar adelante la reforma sanitaria que hiciera posible que todos los norteamericanos tuvieran acceso a la sanidad universal, eso de lo que todos disfrutamos en este país y que no sabemos valorar en su justa medida. Claro está que las grandes empresas privadas (aquí conocidas por mutuas) hicieron imposible el sueño de la Clinton.

Se ha dicho de ella que es arrogante, que le gusta el poder. Resultará que a Obama y a McCain por ser hombres no se les adjudica el mismo afán de notoriedad, pero ¿no persiguen los tres lo mismo? Ser presidente de su país e intentar cambiar las cosas. No, ella es una distante, una ambiciosa, una mujer sin freno. Perdida la batalla con honra y tras algunos errores, ha sido la primera en ponerse al lado de Obama. ¿Es eso un signo de arrogancia?

Perdonen, pero sin dejar de gustarme Obama, la prefiero a ella porque alocución tras alocución y discurso tras discurso ha demostrado tener las ideas claras. No irá en el tickect con Obama, no será su vicepresidenta, pero ha abierto una brecha en el camino hacia la igualdad a costa de su descalabro, seguramente merecido por la mala estrategia, pero al fin y al cabo una gran brecha.

¿Qué nos podrían explicar Salti y Laura? Queda para sus entresijos de mujeres pioneras. Felicidades a las dos, a todas las demás pioneras y a la Policía Local de Castelldefels en la que hoy hay integradas muchas más mujeres, ¿sin que se note la diferencia? ¡Ojalá!