Similitudes y gratitud

Similitudes y gratitud

{mosimage}Leo esta mañana de lunes el título de la noticia Obama anima a sus dos hijas en sus partidos de fútbol,  y sonrío para mis adentros a la vez que me digo a mi misma: “¡fíjate, éste también!”.

Porque a juzgar por comentarios dichos, por lo visto y también por lo leído en redes sociales, somos muchos, madres y padres, los que pasamos fines de semana de campo en campo y de estadio en estadio acompañando a hijos o hijas en competiciones deportivas varias, y a veces variopintas.

Aunque después de este fin de semana en el "Trofeo Nacional de Escuelas de Rugby” en Madrid, he llegado a la conclusión de que son las y los entrenadores los que realmente se merecen el verdadero reconocimiento porque son generalmente personas que, de manera totalmente altruista, regalan su tiempo personal para enseñar, acompañar, alentar e ilusionar a un puñado de chavales y chavalas en un determinado deporte, sin más recompensa que la de compartir algún que otro momento de gloria puntual y efímero que nunca aparecerá en ningún diario deportivo de gran tirada.

Así que, gracias desde aquí a todas las personas que entrenan y también animan a esos locos bajitos deportistas. Y ruego me permitan una pequeña licencia mis lectores y lectoras, personificar la gratitud en cuatro personas: Leo, Coqui, Edu y Jordi del Castelldefels Rugby Union Club.