El concejal José Barrera abandona AVVIC
{mosimage}El concejal y portavoz del Grup Municipal AVVIC ha abandonado la militancia en el partido por “desavenencias en la forma de gestionarlo”.
Señor Barrera, ¿ha sido una decisión repentina o meditada en el tiempo?
Sin duda meditada, incluso consultada. Desde hace más de un año las desavenencias eran constantes. AVVIC debe ser un partido que se ocupe de los problemas de Castelldefels, no una plataforma para perpetuarse en la poltrona. Los vecinos de Castelldefels esperan de un partido independiente que se ocupe de los problemas concretos, del día a día. No sirve que AVVIC intervenga en asuntos como que se vea TV3 en Valencia o apoyar el referéndum de independencia de Catalunya. No se puede, tampoco, rechazar unas ordenanzas municipales de más de 160 artículos por estar en contra de un punto de uno de ellos ¿Qué busca AVVIC, el bienestar de los ciudadanos de Castelldefels, hacer política o mantener los cobros del Ayuntamiento?
Ha dicho usted decisión consultada, ¿hay más ciudadanos que apoyan su iniciativa?
Muchos. De hecho son los mismos vecinos a los que consulté antes de entrar en AVVIC. Más todos aquéllos que apoyaron mi incorporación con su voto. Demasiada gente ha entrado y salido del partido desde su fundación; gente, en muchos casos, muy entregada a la ciudadanía por medio de asociaciones de diversos tipos. Pero todos, incluyendo a Mireia Ferré, la antigua portavoz, hemos dejado el partido por las mismas razones: no se puede entregar un partido a una persona, a una familia. No se puede dirigir un partido desde un domicilio particular. Quisimos cambiar todo eso, pero AVVIC, a día de hoy, sigue siendo un partido cerrado en sí mismo.
Pero, con su decisión, usted se sitúa en una posición cuando menos incómoda.
Nunca me he sentido mejor desde que llegué a la concejalía. Acepté presentarme por el apoyo de esos vecinos que esperaban algo de mí y puedo decir que a muchos ciudadanos he ayudado: gestionando quejas, transmitiendo sugerencias, intercediendo, asesorando…Hay muchas cosas que no he sido capaz de hacer, por las que me he sentido impotente, pero sé que muchos vecinos que lean esta entrevista saben que en algo he colaborado para hacer mejor la vida en nuestra ciudad.
¿Cuál es su futuro político a partir de ahora?
La verdad es que nunca me he considerado político. A diferencia de otros concejales, yo vivo de mi trabajo. Colaboro con Castelldefels desde que llegué a esta ciudad, hace ya 15 años. Primero en dos asociaciones de vecinos; en plataformas por la defensa de terrenos asediados por la especulación; luego en un partido que creía independiente; ahora, como no adscrito, más independiente y transparente que nunca. Acabaré esta legislatura intentando seguir ayudando a aquéllos ciudadanos que me lo soliciten.
¿Se arrepiente usted de haber entrado en política?
En absoluto. Yo no soy político, pero no voy a quedarme en el sofá de mi casa criticando a los políticos sin hacer nada. Siendo concejal he valorado más que nunca la labor de las personas que deben compaginar su trabajo con sus cargos políticos; he conocido a gente honrada, de casi todos los colores, pero también actuaciones mucho más que mejorables. Seguiré intentando ayudar a Castelldefels desde donde sea, pero no desde el sofá.
Para terminar, ¿qué le diría al electorado, a los ciudadanos?
Que hay involucrarse en tu ciudad. Hay que votar, hay que opinar, sugerir. Y que no todos los políticos están sucios. Delante de personas que calientan sus posaderas en una poltrona hay otras que trabajan sin más interés que la ciudadanía. Sólo los ciudadanos, con su voto, pueden mantener a los que trabajan por la ciudad y mandar a su casa a los que viven del cuento.