Buenos propósitos
{mosimage}Siempre que comienza un año, solemos hacer buenos propósitos, que conforme van pasando los meses, se van dejando en el olvido.
Propongo, para comenzar bien 2012, que retomemos la sana costumbre de asistir a exposiciones de categoría y que, difícilmente, volveremos a tener ocasión de disfrutar, máxime si, como esta, es gratuita. Para ello debemos desplazarnos a un lugar muy agradable: Casarramona, lugar del que os he hablado y contado su historia alguna vez. Para algunos, quizás le suene más si digo Caixaforum, sita en la avenida Francesc Ferrer i Guàrdia, 6 – 8 de Barcelona. Allí desde el 15 de febrero y hasta el 20 de mayo, podemos ver la exposición dedicada a Eugene Delacroix, el pintor más representativo del Romanticismo francés y uno de los nombres esenciales de la historia del arte universal. La exposición viene de Madrid en la que ha sido la primera retrospectiva del francés en nuestro país. Se trata de un recorrido por las diferentes etapas de su producción, desde las primeras obras, que buscan la inspiración en el museo, hasta la etapa de madurez, en la que el artista extrae sus temas de la realidad, haciendo especial hincapié en sus obras de historia así como las orientalistas, reunidas por primera vez desde 1963, año de su centenario. Especial interés, tiene la conferencia inaugural el 15 de febrero a las 19 a cargo de Sébastien Allard, comisario de la exposición y conservador del Departamento de Pintura del Louvre, museo que ha cedido excepcionalmente las obras. Podemos contemplar 130 obras del pintor, entre cuadros definitivos y bocetos. En palabras de Isabel Fuentes “Delacroix, recorre fielmente todo su camino y muestra dos de sus obras cumbre: 'Grecia expirando sobre las ruinas de Missolonghi' (1826), que pintó para una exposición que recaudaba fondos para los revolucionarios griegos (una empresa a la que sumó al leer a Lord Byron), y 'Mujeres de Argel' (1834), en la que captó un instante de intimidad de un harén”. Este artista, continúa Isabel Fuentes, "fue de los primeros que empezó a mezclar los colores primarios sobre el lienzo y no sobre la paleta, algo habitual después con los impresionistas, que lograba unos tonos imposibles de lograr en la paleta". También es interesante la opinión de Pilar Ortega: “Uno de los atractivos de la muestra es que descubre la estrecha relación que Eugène Delacroix tuvo con España, ya que, durante el viaje que emprendió al norte de África en 1932, le dio tiempo a hacer varias escalas en Algeciras, Cádiz y Sevilla. «Todo Goya palpitaba a mi alrededor», escribió a su amigo Pierret en una carta en la que desvelaba su excelente conocimiento del artista aragonés. Después, curiosamente, sus pinturas tuvieron especial incidencia en Picasso, quien le honró con una serie inspirada en 'Mujeres de Argel'.
Horario: de lunes a viernes de 10 a 20. Sábados, domingos y festivos de 10 a 21 h. Para visitas comentadas, en el teléfono 93 476 86 30.
Felipe Sérvulo
fservulo@hotmail.com