El PP ha vuelto a demostrar que no lo interesa para nada la situación de las familias que se ven amenazadas con ser expulsadas de sus viviendas ante la imposibilidad de atender el pago de la hipoteca o del alquiler por culpa de la crisis. Si antes lo demostró en Madrid, ahora lo deja claro en Castelldefels, con la colaboración de CiU y AVVIC.
Estos tres grupos municipales, que gobiernan juntos en Castelldefels, han evitado que prospere la iniciativa que el PSC impulso en el último pleno. ¿Y qué se pedía en esta iniciativa? Vean:
– que el Ayuntamiento no opere con aquellas entidades bancarias que promuevan desahucios de personas empadronadas en nuestra ciudad.
– que la Policía Local, sin contravenir la ley, deje de prestar apoyo en estas actuaciones.
– que el juzgado atienda favorablemente los escritos de suspensión de desahucios presentados por los afectados.
– que se cree un Servicio de Mediación Hipotecaria dentro de la Oficina Local de Vivienda de aquellas personas o familias que no pueden hacer frente al pago de su hipoteca e interceda entre éstas y los bancos.
– que las personas desahuciadas quedaran exentas de pagar el impuesto de plusvalía por transmisión de vivienda.
– que en los casos de alquiler también se suspendan los desahucios en los casos en los que esté involucrada una administración o una entidad financiera y se acredite la imposibilidad del hacer frente al pago de la mensualidad.
Queríamos que todas estas medidas se aplicaran hasta que el Gobierno apruebe (si es que llega a hacerlo) una normativa hipotecaria que contemple, entre otras medidas, la dación en pago como forma de extinguir las deudas con las entidades bancarias y la posibilidad de permanencia del deudor en el domicilio de litigio bajo una fórmula de alquiler social.
Estas propuestas suponían la renovación de nuestro compromiso con el derecho a la vivienda y una manera de aliviar las dificultades que muchas personas tienen por culpa de la crisis económica. Lamentablemente, el gobierno municipal de PP, CiU y AVVIC tiene otras prioridades. Y como cada vez hay más comercios cerrados y también menos cursos de formación para personas en situación de desempleo que en años anteriores, comprobamos que luchar por mejorar la situación económica en la ciudad tampoco es un objetivo prioritario. El problema es que casi dos años después desde que llegaron al gobierno municipal aún no han dado señales de saber hacia dónde quieren llevar Castelldefels.