Las zonas verde y azul en la playa, o cómo hacer mal lo que podría haberse hecho bien

En las últimas semanas, el caudal de improvisación que en estos dos años ha ido dejando el gobierno municipal formado por PP, CiU y AVVIC se ha desbordado hasta generar una sensación de caos en buena parte de la ciudadanía. La gota que ha colmado el vaso de la paciencia ciudadana ha sido la implantación del sistema de pago por aparcar (zona verde para residentes y zona azul para visitantes) en los barrios de la playa.

La iniciativa del gobierno municipal ha provocado las protestas de muchas personas y la inquietud de muchas otras más. Son unas cuantas las razones para el rechazo de la medida de hacer pagar por aparcar en el frente marítimo de Castelldefels, pero todas tienen el mismo fondo: no se han hecho las cosas bien. Y esa es la línea que separa la acción de un mal gobierno de la actuación de un buen gobierno: hacer las cosas bien, lo que significa escuchar y calibrar las consecuencias de las medidas que se toman con la intención de reducirlas al máximo.

Pero este gobierno municipal, como ya ha demostrado en muchas otras ocasiones, no escucha. Este equipo de gobierno formado por PP, CiU y AVVIC va a lo suyo y entra en los temas como un elefante en una cacharrería. En unos casos (como recientemente con el proyecto de tercer tramo del paseo marítimo) esconde la información. En otros, como este de la zona azul y la zona verde en la playa, lo pone en marcha sin molestarse en tejer complicidades con la población. Y para que no dé tiempo a que la ciudadanía replique el proyecto, aceleran su puesta en marcha pase lo que pase.

Esta manera de hacer las cosas ha tenido un par de consecuencias destacables. La primera, el caos: personas que, pasado el plazo, no habían recibido las tarjetas verdes de residente, otros que las recibían pero con los datos equivocados. El segundo, el fracaso de la medida: para una ciudad turística como Castelldefels es un paso atrás ver casi vacío el  paseo marítimo en pleno mes de agosto, mientras en las localidades vecinas aumentan los visitantes de sus playas.

Sería deseable que el gobierno municipal rectificara. Una gran parte de la ciudadanía de Castelldefels lo está reclamando. Estamos de acuerdo en que hay que encontrar una solución al problema del aparcamiento, que se produce básicamente en verano, en los barrios del frente marítimo. Pero la necesidad de abordar un problema no da carta blanca a obrar de cualquier modo y por decreto. Hay que hacer las cosas bien y sobre todo estar abierto al consenso, una palabra que no está en el lenguaje de este gobierno municipal.