Castelldefels Rugby Unión Club, formado el año 2005
En febrero de 2007 publicamos en La Voz las opiniones de José Luis Córdoba y Miguel “Coqui” Moreno cargadas de ilusión por este deporte y por crear una escuela que entusiasmara a deportistas pequeños y grandes. Dos frases destaco de aquella entrevista: “El rugby o el amor por el balón ovalado” y “el rugby es un deporte de villanos jugado por caballeros”.
Hoy compartimos este espacio con Fernando Rodríguez, presidente del Club
Fernando, ya estabas en el equipo como jugador en aquellas fechas. Ahora eres su presidente, has visto crecer el club, ¿ha sido un trabajo difícil?
FERNANDO RODRÍGUEZ
Ha sido un trabajo muy bonito. El club se fijó como base, desde el comienzo, el desarrollo de la escuela, la formación de jugadores de rugby dentro y fuera del campo. La mayor parte de los medios económicos y humanos de que disponemos se dedican a la escuela de rugby y, poco a poco, esos niños han ido creciendo y se van viendo los frutos. De un equipito de 22 amigos, nos hemos convertido en un club con casi 300 licencias de todas las categorías.
Cuando yo llegué, venía retirado del rugby después de jugar unos años en Irlanda, y un día me acerqué a ver un partido, ese día me tocó buscar unas botas y una camiseta porque faltaba un jugador para completar los 15 para un partido del sénior. Hoy eso es impensable. Las categorías inferiores llevan ya unos años abasteciendo de jugadores al equipo sénior, y lo que viene por abajo es espectacular. Puedo decir, sin temor a equivocarme, que tenemos una de las mejores escuelas de rugby de Cataluña y de España.
Los valores del club están basados en el trabajo en equipo, respeto, disciplina, sacrificio, humildad, altruismo. Fernando, ¿cómo se conjuga todo esto?
Con naturalidad. El rugby lleva implícito todo esto que mencionas. Si no tienes respeto por el rival, el árbitro y los compañeros; si no tienes disciplina sobre lo que te indican los técnicos; si no estás dispuesto a sacrificarte con humildad por tus compañeros, por tu equipo y por tu club, entonces este deporte, simplemente, no es para ti.
Y este es un tema importante. En el mundo en el que vivimos, donde hay una falta de valores impresionante a todos los niveles (sólo hay que leer la prensa para ver hasta dónde llega esta carencia), nosotros estamos intentando que los chicos y las chicas que entran en nuestra escuela los adquieran, y no sólo para jugar al rugby, sino para que los lleven consigo en su vida diaria. Como les suelo decir muchas veces, que sean jugadores de rugby dentro y, sobre todo, fuera del campo.
Cuando digo a la gente con quien hablo que el rugby lo practican chicas, les crea una duda porque creen que el contacto no es bueno. ¿Cómo se inician los más pequeños, chicos y chicas, en este deporte?
Los más pequeños juegan sin apenas contacto, éste se va introduciendo poco a poco con el tiempo, y se les va preparando para que sepan placar y ser placados. Lo de la peligrosidad del rugby es un mito contra el que debemos luchar. Sí, hay contacto en el rugby, mucho, pero eso no quiere decir que se produzcan más lesiones que en otros deportes ni muchísimo menos. Posiblemente, estemos al nivel del balonmano en moratones, pero deportes con menos contacto, como el fútbol o el baloncesto, están a la par en lo referente a lesiones. Es un deporte más, con sus características, pero es menos peligroso placar de frente con el cuerpo preparado para el contacto que recibir una zancadilla por detrás sin esperarla como pasa en otros deportes.
Y las chicas…, ¿qué decirte de ellas?, son un ejemplo en todo. Se entrenan más duro que nadie, se sacrifican como las que más y han conseguido consolidar un equipo en la élite del rugby femenino catalán. En la escuela empiezan juntos, niños y niñas, hasta llegar a la edad cadete y es impresionante cómo juegan las chicas. De hecho, no es extraño que los mejores jugadores de los equipos de la escuela sean niñas.
Con la organización cada año del torneo «Rugby Seven Playa Castelldefels» podemos decir que la playa es vuestra segunda casa después de Can Vinader
Sí, tenemos la suerte de vivir en una ciudad que puede tener rugby en invierno y rugby en verano. Hemos celebrado la décima edición del Seven y esto nos está poniendo en el mapa rugbístico a nivel nacional. Además, este año vamos a recuperar los entrenamientos de los viernes por la tarde en la playa durante todo el verano.
Entrenamientos abiertos a todo el mundo, haya jugado o no a nuestro deporte.
¿Crees que el rugby es un deporte exclusivo para la gente que lo practica y sus familiares y amigos?
Si fuera así, nunca hubiéramos podido pasar de 22 a 300 fichas en nueve temporadas. Es cierto que el rugby engancha, y es muy normal que exista una tradición familiar de padres a hijos por este mismo motivo, pero el rugby, y nuestro club en particular, está abierto a todo el mundo. Eso sí, cuidado…, si lo pruebas te quedas y ¡no lo dejas nunca!
El tercer tiempo, uno de los secretos más populares de este deporte, en realidad, ¿qué entraña?
El rugby no se entendería sin el tercer tiempo. El equipo local invita a comer y beber al visitante y al árbitro en un ambiente festivo y de camaradería. Se comenta el partido, las jugadas, las faltas, se habla, SE CANTA (¡¡y mucho!!). Para quien viene de otros deportes es inaudito ver que dos equipos que se han dejado la piel en el campo, más el árbitro que quizá no haya tenido su mejor día, se junten en la sede del club local a compartir todo esto, pero sin ello no habría rugby. El espíritu de camaradería que emana entre todos es básico. Sí, somos rivales pero, sobre todo, somos compañeros y compartimos el placer por este bendito deporte que inventó un loco inglés cuando se le ocurrió, durante un partido de fútbol, coger el balón con las manos y salir corriendo, pero… esto ya es otra historia…
Fernando, gracias por concedernos esta entrevista y por ayudarnos a conocer “un poco más” este fantástico deporte.