De caperucitas y de lobos

Desde octubre ando dándole vueltas a la conferencia que tengo que impartir para profesionales de salud sexual y reproductiva de la comarca…, porque como cada año alrededor del mes de noviembre y sobre todo del día 25, se activan o reactivan campañas, se organizan jornadas y se publicitan conferencias sobre la violencia de género.

 

Aunque seguro que la mayoría de lectoras y lectores ya saben el porqué de la elección de este día, solo un breve apunte para alguna que otra persona despistada: la Organización de Naciones Unidas (ONU) lo declaró en 1990 “Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer” en memoria de las tres hermanas Mirabal que fueron asesinadas por el dictador Trujillo, en República Dominicana.

 

El tema propuesto por el equipo organizador para mi intervención es sobre los mitos en sexualidad sobre la violencia de género, y andaba yo intentando buscar una manera de explicar toda mi experiencia en la atención de muchas víctimas y también de bastantes agresores de manera ejemplificadora…, quería incluir algunos dibujos y explicaciones de pacientes violadas o abusadas, de jóvenes que han asistido a talleres, de periodistas que al entrevistarme mejoran mis respuestas, pero me faltaba lo que los expertos en oratoria y amantes de los anglicismos llaman “punch”, es decir, algo de fuerza, de originalidad,… Y aunque tengo la casa llena de la garra que necesitaba, fue mi amiga Bruguers la que, sin intención, me dio la idea  diferente que me posibilitaba hilvanar el discurso: hace unos días me envió, vía Facebook, una ilustración sobre la caperucita roja. Y dio en el clavo.

 

Aquí ando, seleccionando entre mis libros de coleccionista de cuentos y otros objetos de caperucita roja, imágenes para identificar a la caperucita y a la abuela con las víctimas, al lobo con los agresores, a la madre con la sociedad y al leñador o cazador con los profesionales y el entorno que intenta ayudar a las caperucitas y a las abuelas y a penalizar a los lobos. No sé qué tal resultará, pero a mí me está haciendo más llevadero prepararme un tema que me remueve más allá de lo profesional.