El chiringuito CARRASCO, uno de los primeros merenderos.
Casa Carrasco (1923)-
Cal Carrasco-Bar Carrasco – Ka-rr Asco (1992)

Fueron pasando los años y tuvo distintos nombres pero el mismo apellido, pero se le atribuye el honor de haber sido uno de los primeros merenderos de la playa de Castelldefels, en 1923, aunque ya funcionaba con anterioridad en temporada de pesca coincidiendo con la afluencia de visitantes a las playas de Castelldefels. Poseían una barraca de cobertura de cañizo y paja, junto a las barcas de los pescadores. Por Oscar López/Fotos cedidas por María Teresa (Mayte) Serrano Pérez.

El Carrasco estuvo ubicado, originalmente, frente al desaparecido restaurante Bañosca, hoy entre el Fosbury y el Restaurante Casanova Beach Club.

Para la pesca del langostino, lubina y magre, utilizaban las redes blancas: el trasmallo. Y para pescar la sepia y el lenguado, necesitaban unas redes teñidas, según me informó el último pescador de Castelldefels, Juan Bautista Julve Pons (1942).

Según Manel Anento Serrano (1955), en aquella década para comprar en “Elías, botiga de queviures”, que estaba cerca de las vías de tren con la avda. de la Pineda, se hacía el trayecto en barca hasta cerca del pueblo porque todo eran marismas. Había sido la antigua taberna de la Manigua, abierta sobre 1890. Ca l’Elias también servía comidas en una mesa de madera con platos de metal clavados y hacía paellas en temporada de verano.

La abuela Carrasca, Asunción Julve Orts, con su nieto Manel Anento Serrano (1955)

El mote, apodo o sobrenombre de “Carrasco”, según Manel (y que le había contado su abuela), les viene de los bisabuelos maternos: Sebastià Julve Sánchez y Maria Orts i Farrons, naturales de Vinaròs, cuya familia en Vinaròs eran carpinteros de ribera (metres d’aixa). Además de dedicarse a la pesca, cuando era necesario hacían ataúdes (además de barcas) empleando la madera de carrasca, muy resistente y valorada en la construcción naval.
La familia, llegada de Vinaròs (Castellón) a Castelldefels, eran unos nómadas en busca de langostinos. Y estaba formada por Sebastián (Sastià) Serrano Santapau (el Carrasco) y su mujer, Asunción Julve Orts (la Carrasca) que había nacido en Vilanova i la Geltrú, con la que se casó en Vinaròs en 1923, que es cuando el primer merendero se hace de obra y pasó a denominarse Casa Carrasco.

El Carrasco arreglando las redes: Sebastián (Sastià) Serrano Santapau

Tuvieron tres descendientes: Sebastián, Asunción (Sionin) y Sebastiana Serrano Julve Esta última contrajo matrimonio con Antonio Anento Castell, contramaestre del Club Marítimo. Y de la unión nació su hijo Manel.

Mucha de esta información ha sido facilitada por Antonio Julve Anento, nacido en 1947 en Castelldefels, junto a Can Calero (hoy calle de la Ribera de Sant Pere y Avinguda dels Banys). El contramaestre era su tío y padrino.

Hay que señalar que Jordi Tresserras Juan es también integrante de esta familia. Sus padres vivían en Castelldefels pero él había nacido en Barcelona aunque al salir del Hospital, vivió en Castelldefels hasta los nueve años a donde continuó regresando hasta hoy.

Recuerda a Nord, el pastor belga que cuidaba del Carrasco. Sus abuelos paternos trabajaban en el merendero los fines de semana y durante el verano: Felip Juan Serrano, pescador y cocinero de barca, sobrino de los Carrascos, y Dolors (Lola) Anento Castell, cuyo hermano Antonio estaba casado con Sebastiana Serrano Julve.

Jordi Tresserras recuerda el merendero construido en la calle 15 en 1947: “Hi havia un espai amb casetes i dutxes. Una cuina gran amb grans focs centrals i un espai per rentar els plats i olles on solia estar el meu avi. Hi havia un gran menjador cobert i una barra que tenia accés des del restaurant i des del carrer. Després hi havia una terrassa de cara el mar amb algunes taules. Al costat hi havia una caseta de fusta que llogava per estades. Un estiu quan tenia 8 anys ho va fer a una francesa que es deia Chantal i que em va ensenyar francès i em va regalar un diccionari. La tia Carrasca en agraïment la va convidar a dinar i jo vaig rentar els gots dels cafès i carajillos.”


Posteriormente, ésta compró el terreno frente al chiringuito (Paseo Marítimo y calle 15) y construyó un establecimiento porque ella se imaginaba que algún día se lo expropiarían. El primer nombre fue Bar Restaurant Sebastià Carrasco, y ella vivía en el piso superior. Después lo alquiló al Sr. Pizarro y se denominó Restaurante La Góndola, hoy se llama Un Lugar.
Y en la misma calle 15 nº 5, su hijo, Sebastián Serrano, casado con Teresa Pérez Quílez (Teruel), donde hoy está El Restaurante El Quince, inauguró el Bar La Ginesta en la parte inferior de los apartamentos, según información facilitada por su hija María Teresa (Mayte) Serrano Pérez (1963). También me comentó que el chiringuito, en el año 1983, fue alquilado al Sr. Pino y en el momento del derribo era un “after” bar de copas, con una abreviatura exótica: “Ka-rr Asco” (1990), alquilado a Guillén y el Pocito, que eran vecinos de Viladecans.

Bar La Ginesta (hoy “Restaurante El Quinze”), fundado por Sebastián Serrano Julve, casado con Teresa Pérez Quílez


Una familia “toda” una institución en la playa de Castelldefels.